Los episodios de racismo en el futbol son cada vez más constantes y en esta ocasión el amistoso entre Nueva Zelanda y Qatar desató uno de los eventos más insólitos relacionados con el deporte y a este problema. Hoy los Kiwis decidieron dejar a la mitad su partido amistoso y ya no salir al segundo tiempo en apoyo a uno de sus compañeros que recibió insultos raciales.
La Selección Neozelandesa dio una muestra de solidaridad y respeto al abandonar el partido amistoso contra Qatar, debido a que uno de sus jugadores habría recibido insulto racista por parte de un adversario. Así lo expusieron en redes sociales donde dejaron en claro su postura y razones del hecho.
“Michel Boxall recibió insultos racistas en la primera parte de un jugador qatarí. El Árbitro no tomó ninguna medida, por lo que el equipo estuvo de acuerdo en no volver para la segunda mitad del partido”, se puede leer en la publicación en Twitter.
Ante esta situación, el estratega de Qatar, Carlos Queiroz, dio su opinión sobre la situación restándole importancia y también comentando que fue durante el descanso que el capitán de los All Whites, le hizo saber que no volverían a la cancha.
“El equipo técnico de Nueva Zelanda apoyó a su jugador. Nosotros apoyamos a nuestro jugador y ellos decidieron abandonar el partido sin testigos de lo ocurrido… El árbitro no escuchó el intercambio, los banquillos y los entrenadores tampoco. Fue simplemente una discusión entre dos jugadores”, comentó el estratega de la selección qatarí.
Por lo pronto, la FIFA no ha emitido ninguna postura, pero se espera que pronto abran una investigación sobre lo sucedido y se esclarezca el tema.